Un amor adolescente: the end

todo iba de maravilla hasta que nuestros padres se dieron cuenta de que ya no éramos solo amigos y no es que no nos dejaran estar juntos si no que según ellos no deberíamos hacer los deberes juntos porque seguro que nos desconcentramos, Alex no podía entrar a mi cuarto ni yo al suyo y cosas de eso tipo, no se que les pasaba a nuestros padres pero no querían vernos tanto tiempo juntos como antes. Después de 6 meses me acostumbre a que las cosas no fueran iguales que antes pero igualmente salía mucho con Alex, una tarde me llevo a un sitio precioso, era un bosque gigante, con un pequeño arroyo y en un árbol Alex construyo una cabaña, de pequeña siempre soñé con una cabaña en un árbol y nunca pensé que él que me la daría iba a ser Alex. Nos tumbamos en el suelo de la cabaña y él me empezó a besar, sentí miedo porque pensé que de besarnos pasaríamos a lo siguiente pero no fue así, y me alegre porque aunque quería darle mi virginidad a Alex  aun no estaba preparada para ello y eso me sirvió para darme cuenta de que me quería de verdad porque si no fuese así él hubiera continuado sin importar lo que surgiera. No se que pasaba en mi casa que cuando llegue mis padres estaban muy cabreados y es que el mocoso de Nico, mi hermano pequeño nos siguió y nos vio entrar a la cabaña y fue corriendo a contárselo a mis padres y claro ellos pensaron lo peor, padre…súper protectores, pero eso no era lo peor, resulta que mis padres sin estar seguros de nada se fueron a la casa de los padres de Alex y discutieron porque decían que tenían a Alex muy descuidado y un monto de barbaridades mas, era muy fuerte ver a mi madre enfadada con la de Alex, antes se llevaban súper bien, siempre tomaban el café juntas, pero verlas así era incomodísimo. Aquella noche llame a Alex por la ventana, le habían prohibido verse conmigo porque sus padres decían que si yo era irresponsable los que tenían que pagarla eran ellos, pero…nunca he sido una niña irresponsable y sus padres lo saben, solo se inventaban cualquier cosa para separarnos, pero no lo iba permitir, nunca he sentido lo mismo por otro niño, se que es amor verdadero y no lo voy a perder por un mocoso chivato como mi hermano.

Alex ya no me llamaba a mi casa por las mañanas pero siempre nos sentábamos juntos, en clase no nos separábamos y por las tardes nos comunicábamos por mensajes, era tan bonito todo lo que me decía:

“Si no puedo vivir teniéndote a mi lado prefiero desaparecer, desvanecerme, porque mi vida no tiene sentido si no es contigo”

Todas las noches nos asomábamos a la ventana y charlábamos durante horas, se hacían aburridos los fines de semana si él, me canse y le envíe un mensaje diciéndole la rabia que sentía al no poder estar con él

“no puedo mas, sin ti a mi lado nada tiene sentido, no puedo aguantar mas, quedamos  en la cabaña a las 17:00”

Y así fue, empezamos a hablar de cómo solucionar el problema, pensamos, pensamos y hayamos la solución –vamos a reunir a nuestros padres y vamos a demostrarles que no queremos de verdad – cuando llegamos a nuestras casas cada uno llamamos a nuestros padres y le pedimos que salieran al jardín, cuando lo hicieron Alex se sincero con ellos – quiero a clara mas que a mi propia vida, por ella lo daría todo y sin ella yo no seria nada, ustedes querrán separarnos pero eso no va a servir de nada porque nos queremos y nadie se interpondrá entre nosotros y si creen que la voy a hacer daño están confundidos, nunca seria capaz de faltarle el respeto, porque no me lo perdonaría a mi mismo- en ese instante nuestros padres se emocionaron y comprendieron que estábamos hechos el un para el otro.